Se presentaba el a priori encuentro más difícil de la temporada, en el campo del líder y tras una serie de derrotas dolorosas en las que unos días el mal juego y otros la mala suerte habían impedido sacar algún punto. Trece fueron los hombres de los que pudo disponer el técnico pistacho para componer un once de garantías. La novedad táctica fue la superpoblación del medio campo con hasta cinco hombres, dos de ellos en las bandas, con el objetivo de intentar frenar el caudal ofensivo del Mystica.

 La primera mitad se tradujo en un quiero y no puedo de los de Villamayor ante el buen hacer visitante. Anes, por iniciativa propia, cerraba el primer pase dificultando mucho la circulación contraria. Diego, Víctor y Nico se plantaban en la zona central impidiendo aproximaciones al área. Las bandas, bien protegidas por Pepe y Dani, tampoco fueron un foco de peligro; y la última solución, los balones largos, era bien abortados por Kike y Nacho. Todo esto no quiere decir que Óscar pasase inadvertido, pero vivió mucho más tranquilo que en el encuentro de ida, cuando tuvo que multiplicarse para evitar una goleada escandalosa.

 A nivel ofensivo, el buen hacer de Nico y Víctor en la salida del balón se veía acompañado por llegadas muy fluidas, sobre todo por la banda izquierda, donde Pepe y Serra intentaban progresar con el balón siempre pegado al pie y a base de paredes. Y Diego, al más puro estilo de centrocampista inglés box to box no sólo colaboraba en defensa sino que llegaba con mucho peligro desde atrás. Gracias a sus internadas tuvo la mejor ocasión de la primera parte en la que tras una gran jugada se plantaba solo delante del portero que sacaba su tiro pegado al palo con una gran estirada.

 Minutos más tarde Gus se tenía que retirar cuando se lesionaba en los isquitobiales de la pierna derecha al chutar un balón bombeado lejos de la portería. La lesión vino precedida del primer gol local, en una salida a la contra de los pistachos en la que la pérdida de balón le cuesta una re-contra que se traduce en un mano a mano del delantero rival que Óscar no logra abortar. Lejos de afectar al juego del Nayjo, pocas jugadas después llegaba el empate al transformar Serra con gran frialdad un rechace que caía a sus pies cuando se hallaba solo frente al portero.

 El descanso llegaba con evidente gesto de contrariedad en los jugadores del líder, que no sabían como meterle mano a un equipo que parecían haber minusvalorado en exceso.

 La segunda parte comenzó con un claro cambio de guión en la forma de jugar del Mística, basada en los balones largos para intentar atrincherar a un Nayjo que aguantaba el resultado sin mayores problemas, si bien es cierto que cada vez le costaba llegar más a las cercanías del área local a no ser que fuese a balón parado. Tuvo que ser un fallo de marcaje en un córner el que diese pie al gol local que instalaba el que sería el resultado definitivo.

 Tras el gol, el líder se encerró mucho en su campo buscando matar el partido a la contra, lo que consiguieron evitar entre cuatro defensas pistachos con mucho trabajo colectivo.  La posesión caía del lado de un Nayjo no acostumbrado a tenerla y eso se notó. Al equipo le costó mucho hilvanar jugadas colectivas, pues además había que sumar el mal estado del campo y el cansancio acumulado tras muchos minutos tras el balón. Sin embargo, los balones largos si que fueron origen de cierto peligro, peinados por un Nico más adelantado que Víctor y peleados por Diego y Anes.

 Uno de estos balones largos acabó en un rechace bombeado que Diego buscaba cuando se veía arrollado por un defensa local. Penalti que Balbino no dudó en pitar a pesar de las numerosísimas protestas de los locales, que además se quedaron con uno menos. Con diez minutos por delante, el Nayjo disponía de una pena máxima para intentar buscar un puntito. Pero el meta local logró adivinar el disparo de Diego e impidiendo así sacar algo positivo a los de la calle Bolívar.

 De ahí al final, poca gasolina en el depósito y ningún hombre más de refresco en el banco. El pitido del árbitro permitía al Mística resoplar de alivio por la consecución de los tres puntos, y al Nayjo salir con la cabeza muy alta por el partido completado.

EL CRACK
Diego: A pesar de fallar el penalti se marcó un partidazo que le hace merecedor de estar en este apartado. Además se "pegó" con toda la defensa rival durante todo el partido y nunca se arrugó.

VAYA DÍA
Gus: No se le notaba muy agusto en la banda y encima se lesionó a los 20 minutos de partido. Una pena para el Maragat's Uncle

EL DANDY
Pepe y Serra: hicieron una gran primera parte por su banda. Casi ni una aproximación en contra y mucho juego generado. Se notó  la ausencia de Serra en la segunda parte.

EL DURO
Nico: se ganó la octava tarjeta de la temporada por la enésima falta táctica del partido

EL ARBITRO
Balbino (8): no se casa con nadie y pita lo que ve, además de correr mucho y seguir de cerac las jugadas. Todo lo que se puede pedir en un árbitro