Nueva ocasión para el Nayjo de seguir sumando puntos ante uno de los rivales de la parte baja de la clasificación. La oportunidad fue aprovechada con lo que la barrera de los 50 puntos está cada vez más cercana. El partido estuvo marcado en gran medida por las condiciones ambientales que lo rodearon. Un campo arenoso y muy grande –Castellanos de Moriscos-, con un calor importante al disputarse a las 12 de la mañana y por qué no decirlo, con unos balones bastante malos

 La primera parte estuvo marcada por la intención de ambos equipos de jugar el balón en posesiones largas y no abusar del pelotazo, cosa nada fácil atendiendo a las condiciones del campo. La verdad es que a pesar de las buenas intenciones el juego no fue demasiado fluido y sólo se creó verdadero peligro en acciones precedidas de fallos defensivos por parte de ambos conjuntos.

 El único gol del encuentro llegó a los 10 minutos de empezar en un balón rechazado tras un córner que recogía Víctor en medio campo rival. Su pase a la espalda de una defensa que tiraba bastante mal la línea era aprovechado por Anes para batir de vaselina al portero con su habitual frialdad. El resto de la primera parte siguió los derroteros antes descritos. Muchas pérdidas en medio campo y pocas ocasiones de gol.

 A destacar un par de los locales acercándonos ya al descanso en las que Óscar se vio solo ante el peligro. La primera se marchó muy desviada –previo bote horroroso del balón- y la segunda fue repelida por nuestro arquero gracias a una excepcional parada.

 El 0-1 parecía un buen resultado para los pistachos dado el juego desplegado sobre el campo. En la segunda mitad el cansancio empezó a hacer mella en ambos conjuntos y empezaron a aparecer ocasiones muy claras, especialmente en las botas de los delanteros del Nayjo.

 Hasta cuatro jugadas en las que un delantero pistacho encaró al portero del Bar de Goyo fueron clamorosamente marradas. Un par de Jorge, en las que estuvo demasiado acelerado, y otras dos de Gus, especialmente la última de todas tras un excelente regate y con el portero ya en el suelo, no sirvieron para aumentar la ventaja. Aparte de estas, varios remates en faltas laterales y córners no sirvieron para volver a perforar la red rival.

 A falta de un cuarto de hora, el Bar de Goyo seguía vivo en el partido cuando podía ir perfectamente goleado y sacó fuerzas de flaqueza para intentar buscar el empate. La verdad es que solo tuvieron dos oportunidades pero fueron clarísimas. La primera tras un balón que se traga Nacho por culpa de un mal bote y que cae a los pies de dos delanteros rivales que encaran solos a Medina. El remate de uno de ellos es despejado con una mano prodigiosa del cancerbero visitante a córner. Dicho córner, mal defendido por los pistachos, sería el origen de la segunda gran jugada de  peligro. Balón que cae a los pies de un jugador rival que se gira dentro del área y chuta pegado al palo. Cuando parecía que se colaba, el pie de Pepe desvía el esférico a córner para desesperación local. Tras esa oportunidad, poco más que reseñar de peligro. Sólo un par de contras de los de la calle Bolívar en que a pesar de la superioridad numérica no se pudo concretar ningún gol más.

 Con un triunfo más sufrido de lo esperado al principio del partido se cerraba la jornada con tres puntos más en el contador del Nayjo.

 EL CRACK

Óscar: dos manos prodigiosas suyas y un pie de Pepe permitieron lograr la victoria.

 VAYA DÍA

Nacho: estuvo bien en el corte pero tuvo muchos problemas a la hora de hacer circular el balón. El único fallo que tuvo en defensa pudo traducirse en el empate.

 EL DANDY

Anes: preciosa su definición en el gol con una plástica vaselina. Dejó un par de detalles más, sobre todo un taconazo en área rival que Jorge no pudo aprovechar para cerrar definitivamente el partido.

 EL DURO

Guille: recibió la única tarjeta del partido por protestar reiteradamente una decisión arbitral. Aparte de esta pequeña incidencia, nada más a señalar.

 EL ÁRBITRO: Juli (Calificación:9)

Puede ser junto con Balbino uno de los dos mejores árbitro de la competición y cada vez que nos pita lo demuestra. Un poco frío en el trato con el jugador pero muy acertado en la gran mayoría de decisiones.