Derrota con la cabeza alta Derrota por 2-0 de un Bar Nayjo al que no le bastó con su fuerza de voluntad para hacer frente a un serio Calvarrasa y al parcial arbitraje de Teyo.   El encuentro se disputó en el Felipe Mateos de Nuevo Naharros como consecuencia del mal estado del Municipal de Calvarrasa de Arriba. Al igual que en la jornada anterior, el Bar Nayjo tenía que hacer frente a la dureza de un rival de la zona alta y al mal estado del terreno de juego. Pero los pupilos de Nicolás Martín supieron adaptarse a las circunstancias y fueron un digno rival al no bajar nunca los brazos. La primera parte estuvo marcada por el claro dominio del conjunto local. Calvarrasa aprovechaba su fortaleza en el medio campo para lanzar rápidos pases a sus delanteros. El Nayjo en estos primeros minutos abogó por juntar las líneas y esperar a que pasara el asedio rival. El conjunto de la calle Bolívar, apoyado en su buena colocación, lograba frenar las acometidas rivales. Si bien no pudieron evitar que en un corner excelentemente botado Calvarrasa se adelantara en el marcador de un cabezazo inapelable. El Nayjo se estiró e intentó acercarse a la portería rival por medio de rápidos contragolpes, pero la buena labor de la defensa rival y el irregular terreno de juego hacían harto difícil crear ocasiones claras. El arbitraje de Teyo ya sembraba dudas sobra su  imparcialidad al comprobar la facilidad con la que le eran pitadas faltas en contra, más de una docena al Bar Nayjo. Este ‘doble rasero’ supuso que al Nayjo no se le pitaran a favor más de un par de faltas, pese a que Calvarrasa (sin jugar sucio) se estaba mostrando contundente a la hora de disputar el balón. No obstante, su arbitraje aún no había sido decisivo en el marcador. La segunda parte comenzó con un Nayjo que subió líneas en busca del empate. Calvarrasa se replegó atrás buscando un contragolpe que le sentenciara el encuentro. La segunda mitad estuvo marcada por el constante goteo de faltas en contra del Bar Nayjo. Teyo, el colegiado septuagenario, sancionaba prácticamente cada balón mínimamente disputado que el Bar Nayjo recuperaba. Dificultando ostensiblemente que el Nayjo llegara al campo rival con el balón en su poder. Hubo varios encontronazos fruto de varias entradas fuertes en las que el colegiado no se dignó ni a mediar ni a amonestar, por muy clara que fuera la entrada. Esta dejadez del colegiado dio lugar a que cada vez hubiera más piques entre los jugadores. Mediada la segunda parte tuvo lugar la jugada que prácticamente cerró el encuentro. Un pelotazo del Calvarrasa cae a la espalda de la defensa del Nayjo (situada en el círculo central). Balón que aprovecha un delantero rival en clarísimo fuera de juego (3 ó 4 metros siendo benévolos) para batir a Gonza tras ganar el balón de cabeza con el cancerbero fuera del área. Esta jugada fue la gota que colmó la paciencia de los jugadores del Nayjo, que vieron como el árbitro se borró literalmente del encuentro para dejar de pitar incluso las jugadas más elementales, no se sabe si bien  por incapacidad o bien por afán de beneficiar a Calvarrasa. Sorprendentemente, tras el 2-0 el colegiado empezó a emplearse con más rigor y a pitar de forma más equitativa. Lo que nos hace cuestionarnos si el arbitraje realizado antes del 2-0 no era claramente premeditado. Con la moral muy dañada tras un arbitraje tan casero y tendencioso, el Nayjo intentó cumplir con el trámite y esperó a que el partido se acabara con un 2-0 a favor de un Calvarrasa que, reconociendo que fue merecedor de la victoria por su buen encuentro, recibió una ayuda innecesaria por parte de un colegiado que en caso de duda no recela en favorecer al ‘fuerte’. EL CRACK → NAYJO El equipo tiró de orgullo y fue un digno rival. Peleó y luchó hasta donde le dejó el colegiado. ¡VAYA DÍA! → JULIÁN Le dieron hasta en el carné de identidad… pero Calvarrasa se fue sin una sólo amonestación. EL DANDY → CALVARRASA Encuentro muy serio por su parte, intratables en defensa. No necesitan de ayudas arbitrales para doblegar al Nayjo. EL DURO → TEYO Arbitraje casero hasta extremos insospechados. Regaló un gol a Calvarrasa. Acribilló al Nayjo a faltas. No amonestó a ningún jugador del Calvarrasa pese a varias entradas por detrás. Y a su habitual falta de diligencia y criterio añadió prepotencia.