Jerónimo Gil Pérez

El padre de Jero (acompañado casi siempre por su hija) es uno de los mayores feligreses de la parroquia de la Calle Bolívar (nota de autor: me refiero al Bar Nayjo, no a la Iglesia de Fátima que está también en ese calle).

Destaca por su buen humor y su buen carácter. 
Siempre intenta ayudar al equipo y tiene el detalle de comprar agua cuando se percata de que no hemos traído. Este gesto, que siempre tiene con nosotros sin pedir nada a cambio, le ha hecho ganarse el cariño de los jugadores. 

Si encima ahora se compromete a venir siempre que pueda a firmar el acta para evitar que nos multen tenemos que estarle doblemente agradecidos.